La cocina de Habitual abre sus puertas, levantando un telón y descubriendo la cara más íntima y personal del restaurante que Ricard Camarena abrió en el Mercado Colón de Valencia en 2015. Una gran sala rectangular que se presenta como si se tratara de un anfiteatro invertido, donde en el perímetro se encuentra la acción y en el centro los espectadores.
Su ampliación, a cargo dele studio valenciano Made Studio, concibe un espacio para que el usuario se involucre en el proceso culinario gracias a una imponente cocina abierta diseñada bajo parámetros de función y optimización de los procesos, pensada para la distancia entre el fogón y la mesa se reduzca a lo mínimo posible. Mobiliario sincero y operativo, pensado para que el servicio al cliente sea lo más inmediato y directo posible.

